Densidad de Vías

Una de las causas directas más importantes de la deforestación en bosques tropicales es la expansión de la red vial (Geist y Lambin 2002; Barber et al. 2014). Los patrones de accesibilidad influencian las decisiones de uso del suelo a nivel local, por ejemplo, en relación a los sistemas productivos y a los cultivos específicos implementados (Salonen et al. 2012). Dado que el suelo de bosque posee una capa orgánica muy delgada y carece de los nutrientes que suelen requerir los cultivos, las actividades productivas pueden durar relativamente poco o requerir de una intensiva aplicación de fertilizantes, especialmente si se trata de monocultivos. En este caso, el cambio de uso del suelo involucra la transformación de ecosistemas con alta biodiversidad en un tipo de cultivo que generalmente no se relaciona con el autoconsumo de las comunidades (Palma 2017).

Sin embargo, el impacto de la accesibilidad sobre procesos de deforestación y decisiones de uso del suelo no es lineal. Por ejemplo, una mayor accesibilidad hacia zonas urbanas ha facilitado que campesinos migren estacionalmente para involucrarse en diversas actividades económicas, lo que produce escasez relativa de mano de obra en las regiones de origen. Estos procesos han generado un aumento en las zonas dedicadas a sistemas productivos ganaderos, que requieren comparativamente menor mano de obra que los sistemas agrícolas (Rudel, Bates y Machinguiashi 2002).

La narrativa generalmente aceptada es que la construcción de vías en áreas donde hay prevalencia de bosque casi siempre se traduce en deforestación. Sin embargo, la construcción de vías, sobre todo las de segundo y tercer orden, mejoran las condiciones de vida de poblaciones remotas, pues facilitan el transporte de sus productos e incrementan la posibilidad de comercialización a mejores precios. Esto se convierte en un importante dilema entre las necesidades sociales y los riesgos ambientales. Por este motivo, los proyectos de construcción de vías requieren un minucioso estudio y balance entre estos dos ámbitos, así como la construcción de políticas y rigurosos sistemas de monitoreo y control, con el fin de maximizar los beneficios sociales y minimizar los impactos sobre los bosques.

A nivel nacional, se observa que la mayor concentración de vías ocurre en la Costa centro y sur, y en el callejón interandino. En términos absolutos, la mayor longitud de la red vial se encuentra en ecosistemas de bosque seco de la costa, bosque siempreverde de la costa, bosque siempreverde andino y arbustal andino. En términos de densidad vial promedio por parroquia, la mayor densidad ocurre en arbustal andino y bosque seco de la costa.